A la mayoría de las personas amantes de los animales les gusta recibir un beso en la mejilla de un perro cariñoso. Incluso sin decir nada, muchos perros le lamerán la mejilla si se acerca a él y lo acaricia. Si su perro no lo hace, o si quiere que lo haga cuando se lo ordene, simplemente póngase un poco de mantequilla en la mejilla y dígale «Dame un beso». Tras unas cuantas prácticas, le lamerá la mejilla sin necesidad de ayuda.
Si desea que su perro, además de cariñoso, parezca todo un caballero, pruebe la misma técnica para que bese la mano de una dama. Asegúrese de que distingue la palabra mejilla de la palabra mano, para que dé el beso donde usted le indique. Seguro que el galán recibirá un montón de abrazos a cambio.
Fuente: Trucos Caninos; Capitan Arthur J. Haggerty y Carol Lea Benjamin
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