Como Evitar que su Perro Destroce Todo

Muchos perros, desde el caniche más refinado al mezclado más campechano, parecen tener una cara oculta. Cuando usted está en casa, su perro se comporta de maravilla, pero cuando está trabajando o durmiendo, su personalidad se transforma y muestra su lado oscuro, como descubrirá más tarde al encontrar su camiseta hecha jirones, los zapatos mordisqueados y las plantas fuera del tiesto.

Los cachorros lo muerden todo, por lo que después de comprar un bol para la comida, un collar y un juguete, recoja todo lo que esté en el suelo y a su alcance. Sin embargo, este tipo de conducta no tiene límites de edad. Algunos perros adultos, tras llevar años portándose bien, olvidan lo aprendido y se desmadran. No tratan de castigarle por dejarle todo el día solo, simplemente dan rienda suelta a sus emociones.

Los perros no manifiestan sus emociones como nosotros, por lo que a veces olvidamos que compartimos muchos sentimientos, como la ansiedad, la frustración y el aburrimiento. No pueden decir cómo se encuentran, pero sí mostrarlo, a veces con una conducta destructora.

«No es una coincidencia que los perros suelan causar más destrozos cuando están solos», dice Daniela Ortner, psicóloga canina de Los Ángeles, California. Hasta que no aparecimos nosotros, los perros vivían en jaurías, por lo que no les gusta estar solos. Para su perro, usted forma parte de esa jauría y cuando se va de casa, él se siente abandonado. Al sentirse ansioso, puede experimentar el equivalente canino de una demencia temporal y comenzar a destrozar todo lo que encuentra. Es su forma de mostrar su rencor.

A no ser que pase todo el día en casa, no es fácil controlar las andanzas de su perro. Requiere tiempo y paciencia, pero hay algunas maneras de ayudarle a hacer frente a la soledad.

Búsquele trabajo.

Los perros que se muestran seguros de sí mismos casi nunca causan destrozos cuando están solos. Una buena manera de potenciar su ego es encomendarle alguna tarea -desde practicar deportes caninos a visitar hospitales o asilos-. «Además, al realizar actividades se cansará y será más probable que duerma en vez de hacer travesuras cuando usted esté fuera», dice Patricia McConnell, psicóloga canina de Black Earth, Wisconsin.

Los perros necesitan un adiestramiento especial para trabajar. No es mala idea, ya que a muchos les gusta este adiestramiento de obediencia y sobre todo los elogios que reciben por realizar un buen trabajo.

Mantenga sus mandíbulas ocupadas.

Los perros lo muerden todo cuando están molestos porque es su manera de aliviar la tensión y de pasar el tiempo. «Para evitar que esto suceda, ofrézcale otras alternativas, como un juguete de goma o una pelota de tenis», dice Steven Appelbaum, psicólogo canino de Northridge, California. «Darle una caracola de goma es una buena idea», dice el doctor McConnell. Está fabricada con una goma resistente, es hueca y permite guardar pequeñas cantidades de comida en su interior, como queso o un poco de mantequilla. Los perros pueden pasar horas intentando sacar la comida del agujero.

A la hora de escoger sus juguetes, evite los calcetines o los zapatos viejos. Su perro no distingue unas zapatillas viejas de unas completamente nuevas. Si le deja jugar con un zapato, pensará que todos son de juguete.

Use un repelente.

Algunos perros tienen un objeto favorito (desde la pata de un piano hasta el marco de una puerta) y no dejan de morderlo. Para evitarlo, rocíelo con algún producto que sepa o huela mal, como el toronjil, de venta en tiendas de animales.

Otra forma de conseguirlo es poner una trampa en las cosas que muerda -por ejemplo, meter unas monedas en una lata vacía y atarla al objeto deseado. Cuando se haga con él, el ruido le asustará y hará que se lo piense dos veces la próxima vez antes de morderlo.

Déle su propio espacio.

Los perros se sienten atraídos por los espacios pequeños y cerrados, sobre todo cuando están inquietos. A decir verdad, muchos perros se sienten inseguros cuando pueden vagar por toda la casa libremente, ya que no saben qué hacer con todo ese espacio. Intente dejarlo en una estancia pequeña o acostúmbrelo poco a poco a estar encerrado cuando usted no esté en casa. Así se sentirá más seguro y será menos probable que se desmadre.

Sabotee sus excavaciones.

Algunos perros causan destrozos en casa, pero otros lo hacen en el jardín. «Es muy difícil conseguir que un perro deje de escarbar la tierra, pero usted puede ponérselo más difícil enterrando piedras de lava en esa zona para que se haga daño y la idea deje de gustarle», dice Appelbaum. O córtele las uñas para que no pueda escarbar, pero no las corte mucho para no dañarle la carne viva.

Entre inesperadamente de vez en cuando.

Si tiene la suerte de trabajar cerca de casa, puede volver a la hora de comer. Al visitar al perro durante el día, su aislamiento se verá interrumpido y estará menos inquieto cuando usted se vaya. Si no puede acercarse a casa, consiga que un vecino o un cuidador de perros se den una vuelta por allí durante el día. «Al tener a alguien con quien jugar, aunque sólo sean unos minutos, el perro estará entretenido y se olvidará de sus pertenencias», dice Ortner.

Consiga que se canse.

Aunque los perros suelen causar destrozos para calmar el estrés, también lo hacen simplemente porque tienen un exceso de energía y no saben qué hacer con ella. «Una buena solución es conseguir que haga mucho ejercicio justo antes de que usted se vaya por la mañana y cuando vuelva a casa por la noche», dice la doctora McConnell. Un perro que ha agotado todas sus energías es menos probable que se dedique a causar destrozos.

Fuente: El Veterinario en Casa; Matthew Hoffman