Consejos para Cuidar a un Perro con Artritis

Estaría bien que los perros se mantuvieran flexibles toda la vida. Pero al igual que nos sucede a nosotros, sus articulaciones se tornan rígidas conforme se hacen mayores, sobre todo debido a la artritis, una dolorosa enfermedad que se produce cuando el cartílago de las articulaciones se debilita. Existen diversos tipos de artritis, pero la más común es la osteoartritis. «Los cartílagos se deterioran con el paso del tiempo, al igual que los ojos y la piel», explica William Fortney, veterinario del Departamento de Ciencias Clínicas de la Facultad de Veterinaria de la Universidad de Kansas, en Manhattan.

Algunos perros jóvenes también padecen artritis debido a heridas o infecciones o a enfermedades como la displasia coxal, que consiste en una separación irregular de las articulaciones. No obstante, en la mayoría de los casos la artritis afecta a los perros viejos.

La artritis es potencialmente grave y los perros que la sufren necesitan los cuidados del veterinario. Pero en la mayoría de los casos usted puede controlar o paliar el dolor y la rigidez aplicando remedios caseros sencillos. Además, existen muchas maneras de proteger las articulaciones cuando el perro aún es joven.

Elimine la rigidez

«Masaje sus caderas, codos, lomo, cuello y rodillas durante unos minutos cada día para mejorar el flujo sanguíneo y mantener flexibles los músculos y las articulaciones –aconseja Patrick Tate, veterinario de St. Louis, Misuri. El masaje debe ser consistente.» Ejerza presión con las yemas de los dedos sobre las zonas circundantes a las articulaciones. Al hacerlo, realice todo tipo de movimientos con las piernas. Este «calentamiento» diario servirá para prevenir la aparición de la artritis, pero también para aliviar el dolor si ya la padece.

Manténgalo activo

Los perros que padecen artritis prefieren estar tumbados en la alfombra a corretear por el jardín. Pero el ejercicio regular es muy importante, ya que estimula al cuerpo para que segregue un líquido que lubrica las articulaciones. «El ejercicio también fortalece los músculos situados junto a las articulaciones, lo que impide que la artritis empeore», dice el doctor Fortney. Pasear es una de las mejores maneras de hacer ejercicio, ya que se ejerce poca presión en las articulaciones doloridas. Aunque no se encuentre bien, sáquelo a pasear varias veces al día. Dé paseos cortos y los días que se encuentre más flexible, délos un poco más largos. No se exceda, ya que sus articulaciones pueden inflamarse aún más.

Al agua patos

«Si le gusta el agua, la natación es un buen ejercicio, ya que le permite realizar todo tipo de movimientos de las articulaciones y los músculos y el agua reduce la presión en las articulaciones», dice el doctor Tate.

Vigile su peso

Los perros que están gordos son más propensos a sufrir artritis que los que están delgados. «Y para los que ya la padecen, unos kilos de más suponen una mayor presión en las articulaciones, lo que provoca que se desgasten más rápido», dice el doctor Tate.

Además del ejercicio adicional, la única manera de que adelgace es darle menos comida. El doctor Tate recomienda reducirla en un 10% o un 20%. Si no ha adelgazado nada al cabo de dos o tres semanas, redúzcale un poco más la comida. Si continúa estando gordo, consulte a su veterinario para comenzar un plan de adelgazamiento más severo.

Su aumento de peso no sólo se debe a la comida que le pone en el recipiente. La mayoría de nosotros damos a nuestros perros un sinfín de caprichos, desde galletas para perros hasta sobras, y estas calorías extras se reflejan enseguida. No tiene por qué dejar de mimarlo, pero sí reducir esos «extras». Para ello déle la cuarta parte de una galleta en lugar de una entera. O trate de sustituir esos caprichos por otros bajos en calorías, como pueden ser zanahorias crudas.

Hágale dormir en un lugar cómodo

«A todos los perros les gusta dormir en un lugar cómodo, pero para los que padecen artritis se convierte en una necesidad; dice Karen Mateyak, veterinaria de Brooklyn, Nueva York. Esta doctora recomienda comprar una cama ortopédica de espuma, de venta en tiendas de animales y por catálogo. Además, dado que la artritis se agrava con el frío, conviene ponerlo en un lugar cómodo y caliente.

Cúbralo

El pelaje mantiene caliente al perro. «Pero cuando le duelen las articulaciones y hace un poco de frío, debería ponerle un jersey o un abrigo para perros», aconseja la doctora Mateyak. Éstos le proporcionarán un poco más de calor y de aislamiento, por lo que sus articulaciones se mantendrán flexibles.

Ponga su plato más alto. Los perros no van a permitir que la artritis les moleste a la hora de las comidas, pero en algunos casos agacharse para comer puede provocar dolor y rigidez en el cuello. Algunos perros están demasiado rígidos para alcanzar sus recipientes. Para facilitarle las cosas, evite poner los recipientes de la comida y del agua en el suelo, colocándolos, por ejemplo, sobre una silla baja. O compre un recipiente especial elevado para perros artríticos.

Échele una mano

Lo que resulta frustrante de la artritis es que, aunque el dolor desaparezca durante un tiempo, siempre reaparece. Para que su perro se encuentre más cómodo cuando sufra estos dolores, trate de ayudarlo. Por ejemplo, póngale una rampa cerca de las escaleras o ayúdele a ponerse de pie cuando intente levantarse por la mañana.

Proporciónele alivio

«Los veterinarios suelen recomendar tratar el dolor producido por la artritis con una aspirina», dice la doctora Mateyak. La dosis habitual es de 125 mg por cada 5 Kg. de peso, una o dos veces al día. «Consulte a su veterinario antes de dársela», advierte la doctora Mateyak. Déle la aspirina mezclada con las comidas. Es preferible que ésta sea efervescente, ya que la normal puede resultar pesada para su estómago.

Intente aplicar una alternativa natural

«La glucosomina ha demostrado ser muy útil para tratar la artritis», dice el doctor Tate. No se ha sometido a muchos exámenes científicos, pero, además de no conocerse ningún efecto secundario, regenera los cartílagos de las articulaciones y alivia el dolor y la inflamación. Se puede adquirir en las tiendas de comida sana, en los catálogos de venta por correo, o en el veterinario. «Busque los términos “glucosomina” y “condroitina” en la etiqueta –dice el doctor Tate– y pregunte a su veterinario qué cantidad suministrarle.»

Pruebe con un sabor marino.

Para la artritis se recomienda tomar un producto nutritivo elaborado con mejillones liofilizados, un marisco comestible. «Éste ofrecerá apoyo al tejido conjuntivo”, dice el doctor Tate. Los productos que contienen este extracto desprenden olor a mar y se pueden adquirir en las tiendas de animales o en los catálogos de venta por correo.

Fuente: El Veterinario en Casa; Mathew Hoffman